Autor: Natsume Söseki
Editorial: Impedimenta
Páginas: 256
Precio: 19.95€
Género: Clásico Japones, Narrativa
Sinopsis: Coincidiendo con el centenario de su aparición, Impedimenta publica una
nueva traducción de la obra maestra de Sōseki, que prefiguraría la de
autores de la importancia de Akutagawa, Kawabata o Murakami. «Kokoro»
(«corazón», en japonés) narra la historia de una amistad sutil y
conmovedora entre dos personajes sin nombre, un joven y un enigmático
anciano al que conocemos como «Sensei». Atormentado por trágicos
secretos que han proyectado una larga sombra sobre su vida, Sensei se
abre lentamente a su joven discípulo, confesando indiscreciones de sus
días de estudiante que han dejado en él un rastro de culpa, y que
revelan, en el abismo aparentemente insalvable de su angustia moral y su
lucha por entender los misterios del amor y el destino, el profundo
cambio cultural de una generación a la siguiente que caracterizó el
Japón de principios del siglo XX.
Ninguna biblioteca de literatura japonesa estaría completa sin «Kokoro»,
la novela más lograda de Natsume Sōseki, la más profunda y la última
que completó antes de su muerte.
Mi opinión
Segunda lectura que llevo a cabo con El Club Pickwick, y no puedo estar más contenta. Si no llega a ser por el club, probablemente no hubiera leído esta novela jamás, ya que estaba inundada de prejuicios sobre la lectura japonesa.
En la historia, que está presentada en tres partes, se nos narra la relación de amistad que surge entre un joven y "Sensei", maestro en japonés. A lo largo de la lectura somos espectadores de las conversaciones que llevan a cavo estos dos personajes.
Desde que la historia comienza, hasta que llega al final de la segunda parte, en cada conversación, frase o párrafo, la intriga por el personaje de Sensei va en aumento, ya que nos va dejando entrever que esconde un oscuro secreto que justificaría su forma de ser.
La lectura, sorprendentemente, ha sido muy rápida. Los capítulos de cada parte son breves y la verdad es que se lee practicamente sólo, avanzas a una velocidad pasmosa. Lo curioso de la lectura, y que jamás me había ocurrido hasta ahora, es que vas avanzando en la historia con la firme sensación de que no está ocurriendo nada relevante, pero a la vez te sientes muy intrigada y enganchada a lo que la obra te ofrece.
El personaje que más peso tiene, por todo el aura de misterio que arrastra, es Sensei. Hasta bien entrada la tercera parte no descubrimos su secreto. Es un personaje muy bien presentado, definido y descrito. Posee un magnetismo que atrapa al lector desde su primera frase.
Este tipo de obras requiere un esfuerzo especial para captar todos los detalles que entre sus frases se esconden, y es que es una obra contemplativa. Yo pensaba que me iba a encontrar algo muy denso, y para nada ha sido así. Se lee en un suspiro, pero sí es cierto que puede haber algunos capítulos más lentos que otros, o que den la sensación de que no aportan nada a la historia y sean de relleno total, pero os garantizo que al cerrar el libro y despedirte de Sensei y de su joven amigo, sientes que su lectura ha merecido la pena, y es que es de esas obras que te dejan una resaca literaria importante.
PUNTUACIÓN: 9'5/10
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